Si sabes hacer trabajos manuales, como dibujar, decorar vajillas, esculpir jarrones de barro, o trabajar la piedra, es el momento que saques provecho económico a esa habilidad. Seguramente tendrás tu casa repleta de objetos que has hecho tu mismo, y muy frecuentemente habrás vendido alguno de ellos a amigos y familiares que han quedado maravillados con lo que sabías hacer.
Si es tu caso, haz de saber que podrías tener la posibilidad de acceder a unos ingresos extra cada mes. Lo primero que debes hacer es especializarte en algo en concreto. Por ejemplo, si sabes hacer fofuchas podrías dirigir todas tus creaciones hacia un sector específico, pero asegurándote que puedan llegar a tener algo de tirón mediático.
Por ejemplo, si te centras en un evento deportivo de masas, como podría ser el fútbol, podrías hacer una fofucha por cada futbolista famoso que tenga un equipo en concreto. Céntrate en los detalles más pequeños, y trata que su uniforme se parezca lo más posible al que podrían llevar en la vida real.
Si la réplica se parece lo suficiente al original, seguro que no te costará demasiado encontrar algún fan al que le parezca tan buena idea que comience a coleccionarlas, y tú, como consecuencia, empieces a lucrarte con ello.
No obstante, existen otras muchas manualidades que podrían suponerte unos ingresos extra, y en este punto se incluye desde pintar un cuadro en el que se refleje una puesta de sol, hasta la realización de unos patucos que hayas podido elaborar a mano.
Los objetos de cuero y de madera también se prestan a este tipo de negocios, no en vano, en casi cualquier mercadillo regional se encuentra algún que otro puesto que venda productos de este estilo, con la diferencia de que en lugar de dirigirte a los usuarios que transitan alrededor de tu banco, puedes hacerlo con una masa de usuarios mucho mayor, y sin tener que pagar un sobreprecio por ello.
De hecho, al no tener que invertir tu propio dinero en alquilar un local y sumado a la ausencia de gastos en concepto de publicidad ( el boca a boca suele ser tu mayor aliado), hará que prácticamente la totalidad de lo que ingreses sea tuyo, por lo que en caso de que el negocio no funcione no habrás perdido nada y podrás volver a comenzar con otra cosa.