Una de las primeras cosas que realizan los médicos cuando acudes a su consulta es medirte la tensión. Este dato será
bastante indicativo sobre tu estado de salud y el de tu corazón, uno de los órganos más importantes y que más debemos de cuidar.
A medida que una persona envejece, se hace más importante cuidar y controlar la tensión, tomando pastillas si es necesario para mantenerla estable y evitar que cualquier pico de subida pueda derivar en problemas mayores.
No obstante,
no sólo la tensión excesivamente alta es peligrosa, una tensión muy por debajo de lo normal, sobre todo si se encuentra descompensada también podría provocar problemas de salud e incluso provocar desmayos.
En situaciones en las que la tensión se dispara,
se recomienda mantener la calma y realizar una segunda toma unas horas después. Esto se hace porque muchas veces es algo momentáneo que se deba a situaciones circunstanciales de estrés. En este tipo de casos es recomendable reducir estos valores con el uso de tranquilizantes naturales como la manzanilla.
Si pasado ese tiempo la tensión sigue encontrándose en valores mucho más altos de los normales,
sería recomendable acudir al servicio de urgencias del hospital más cercano y buscar una opinión profesional que nos indique como actuar.
En el caso contrario, es decir,
si la tensión es excesivamente baja, un remedio natural y bastante efectivo es ingerir un producto salado. Generalmente, chupar unos pocos granos de sal gorda suelen hacer efecto en pocos minutos.
En cualquier caso,
la importancia de tener un tensiómetro en casa es bastante alta. Por ello, en este artículo trataremos de ayudarles a elegir el tensiómetro más adecuado de entre todos los productos de este tipo que se comercializan actualmente en el mercado.
¿Quién inventó el tensiómetro?
El tensiómetro no es, ni mucho menos un invento de nuestro tiempo, ni tan siquiera lo era de nuestros padres o de nuestros abuelos. El primer tensiómetro del mundo lo inventó
Stephen Hales en 1727. Este método, si bien fue el primero que medía eficazmente la tensión, también fue uno de los más peligrosos que jamás se hayan inventado, pues consistía básicamente en conectar un tubo de cristal a una arteria, y medir el nivel que alcanzaba la sangre en él.
Todo lo contrario a lo que sucede en la actualidad, en donde puede decirse que medir la tensión no sólo es uno de los métodos más utilizados, sino también es uno de los más inocuos.
Antes de que fuera inventado el tensiómetro como hoy lo conocemos hubo que probar otros muchos experimentos, uno de los más parecidos al actual fue el ideado por
Scipione Riva-Rocci en 1896, quien logró medir la presión arterial a través de un manguito que rodeaba el brazo. Constituyendo las bases para la creación del tensiómetro tal y como hoy lo conocemos.
Tensiómetros Omron:
Omron es la marca por excelencia para la medición y el control de la tensión arterial. No sólo es la que más productos de este tipo vende, sino que además a lo largo de los años han ido mejorando sus prestaciones y características para ser sinónimo absoluto de calidad.
Omron
se esfuerza considerablemente en ofrecer productos que hayan sido clínicamente probados y validados. Es por ello que, antes de comercializar sus tensiómetros, procede a realizar un intenso estudio y análisis de los resultados que muestran sus productos y los coteja con los reales para así poder ir puliendo imperfecciones. Este arduo proceso garantiza una fiabilidad que casi ninguna otra marca es capaz de igualar.
Actualmente, podemos afirmar que
los mejores tensiómetros Omron que puedes encontrar en el mercado son los siguientes:
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Omron M3 HEM-7131-E: Se trata de una de las opciones preferidas por la gran mayoría de usuarios. Fácil de manejar, estéticamente elegante y sobre todo, con una enorme fiabilidad. La inmensa mayoría de cardiólogos lo recomiendan, sin embargo, otros recalcan que en caso de que el paciente padezca arritmia, no suele ser el más indicado.
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Omron M3 HEM-7200-E8: A diferencia del primero que comentamos, este tensiómetro es muy fiable en cuanto a las arritmias, logrando detectar las más pequeñas irregularidades. Es por ello que su precio sea de casi el doble que el anteriormente mencionado.
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Omron PL100 Pro Logic: Es uno de los más utilizados debido a su fantástica relación calidad-precio. Uno de los motivos por los que goza de tanta popularidad es por su fácil manejo. De hecho, basta con apretar un botón para hacerlo funcionar.
¿Cuál es el mejor momento para medir la tensión?
Por norma general, l
os médicos y profesionales suelen recomendar a los pacientes que realicen las mediciones siempre a la misma hora del día. Este proceso habrá que repetirlo durante dos o tres veces cada semana durante un mínimo de cuatro semanas.
Al llegar a una cierta edad o, en aquellos pacientes que tengan hipertensión o hayan casos de este tipo en su familia (recordemos que es algo hereditario),
se recomienda continuar con el mismo proceso de forma indefinida, realizando tres o cuatro tomas a la semana durante toda la vida. Este es posiblemente, uno de los mejores medios para tener la tensión controlada en todo momento.
En cuanto a la hora más conveniente para llevar a cabo una medición fiable,
se recomienda la media mañana como el mejor momento para que los valores sean lo más reales posible. Toca recalcar que durante la noche la tensión suele a bajar, mientras que en las primeras horas de la mañana suele aumentar considerablemente. A las 12 de la mañana suele estabilizarse y, por este motivo, es por lo que este suele ser el mejor momento para medir la tensión.
¿Cuáles son los tensiómetros más vendidos en España?:
Una buena muestra para saber cuáles son los mejores tensiómetros que existen actualmente en el mercado es
fijarse en la lista de los más vendidos. El motivo es simple, si ha sido la opción elegida por una masa de público de tal magnitud, debe ser definitivamente porque la marca en sí merece la pena.
Sin más dilación vamos con los
cinco tensiómetros más vendidos en España:
Buerer BC32: Es un tensiómetro de muñeca que ofrece una gran fiabilidad en sus lecturas, pese a que es de sobra conocido que las lecturas de brazo son mucho más efectivas. En cualquier caso, para mejorar el rendimiento y que los resultados mostrados sean acordes a la realidad, se recomienda realizar las mediciones poniendo la muñeca a la altura del corazón.
Omron M2: La marca Omron, es por sí sola considerada como una marca de gran calidad. Sin embargo, este producto no es ni mucho menos uno de sus productos estrellas, catalogándose más bien dentro de una gama media-baja. A diferencia del anterior, este sí es un tensiómetro de muñeca y permite entre otros, hacer medición del pulso o detectar arritmias, así como guardar la información en su memoria interna.
Omron Pro Logic: También de la misma marca es este tensiómetro que podría considerarse como la opción más económica de la marca pero que está arrasando en los mercados españoles. Entre sus principales carencias se encuentra el hecho de que no almacena lecturas previas, no detecta las arritmias y no cuenta con un sensor que impide el hinchado excesivo del brazalete. No obstante, por un precio verdaderamente bajo cumple su función principal: medir la tensión del usuario que lo lleva puesto.
Medisana MTS: Considerado como el competidor por excelencia de Omron, Medisana también ofrece productos de gran calidad a precios populares. Incluye indicador de hipertensión, arritmia, pulsómetro, estuche y es capaz de guardar hasta 60 datos distintos sobre los datos obtenidos en un máximo de dos usuarios.
Omron M6: Para concluir, el tensiómetro más vendido en España vuelve a ser de la marca Omron. Se caracteriza por su manguito multi-talla que lo convierte en ideal para cualquier tipo de persona (incluido niños), sea cual sea su talla. Al igual que muchas de las anteriores versiones, cuenta con indicador de arritmia, pulsómetro, estruche, indicador de hipertensión y permite guardar en su memoria interna hasta 90 valores distintos.
Mejores tensiómetros para niños y bebés:
Suele ser muy poco común que los niños y bebés tengan que medirse la tensión pues los problemas de este tipo suelen presentarse a una edad bastante más adulta. Por este motivo, encontrar tensiómetros adaptado para el uso en niños y bebés en muchas ocasiones resulta una tarea ciertamente complicada.
El principal problema por el que
un tensiómetro normal no es válido para un niño o un bebé, es básicamente por el tamaño de la cinta que debe ir alrededor del brazo de cada usuario, la cual en muchas ocasiones tiene una medida mínima que no es apta para un uso eficaz en menores de edad cuyos brazos son mucho más pequeños y delgados.
En este sentido,
las pulseras de muñeca podrían ser una opción, sin embargo no son ni mucho menos tan fiables como las de brazo. Por este motivo, lo mejor es comprar un tensiómetro cuyo brazalete sea adaptable y cuyas dimensiones vayan desde los 17 hasta los 22 centímetros (tamaño mínimo permitido). De entre todos los existentes con estas características destacamos los siguientes:
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Omron BRA100-
Omron BRA102-
Omron ES003DS