Si aún tienes por algún rincón de la casa, guardado en un cajón,
un teléfono móvil de hace diez años, seguro que al verlo te llevas una gran impresión, porque no tienen nada que ver con los smartphones de hoy en día. En tan solo unos años, la tecnología y el diseño han evolucionado tanto en estos terminales que es casi imposible imaginarnos cuando todavía no poseían una cámara de vídeo FullHD, o un procesador de cuatro núcleos, o capacidad para todos nuestros vídeos y canciones.
La evolución de los smartphones ha sido increíble… aunque no del todo.
Porque siempre ha habido una parte, un componente, que se ha quedado atrás, como si no se pudiera mejorar… algo que nos extraña bastante.
Pantallas más grandes, mayor potencia y estar todo el día conectados a Internet son cosas que generan un gasto brutal de batería, por lo que se entiende que la autonomía de estos terminales debería ir acorde a ello y por lo tanto, las baterías deberían ser mejores, con mayor capacidad de almacenamiento. Huelga decir que cualquier que tenga un móvil moderno habrá comprobado que no es así, sino todo lo contrario. De hecho,
parece que la autonomía de los teléfonos es cada vez menor.
¿Por qué tengo que cargar el teléfono todos los días?
Salir de casa para un buen rato sin tener el teléfono por encima de la mitad de carga es un riesgo demasiado alto para muchos. Antes de los smparthones, las baterías duraban dos y hasta tres días sin necesidad de cargarlas. Ahora debemos hacerlo al menos una vez al día, cuando no más, si le damos un uso intensivo a nuestro terminal.
Las razones son obvias: tenemos aparatos muy potentes y eso significa que gastan mucha más batería, por lo que hay que alimentarla más veces.
Sin embargo,
en lugar de buscar la manera de hacer baterías igual de pequeñas y seguras para que no se sobrecalienten, pero más duraderas en cuanto a su autonomía, parece que la misión de los fabricantes es permitir que las baterías se carguen lo más rápido posible. Es algo bueno, por supuesto, pero está claro que la necesidad de carga sigue siendo importante, y si estamos fuera de casa puede suponer un problema.
Pero hemos de mirar más allá,
entendiendo todo el dinero que gastamos cargando esos terminales enchufados a la corriente eléctrica, o el negocio que hay montado con las baterías externas… Y tal vez logremos entender porque los fabricantes se conforman con dejar tal y como están las baterías, a pesar del hastío de los clientes. Mientras sigamos comprando terminales…
Consejos para ahorrar batería en nuestros smartphones
Para luchar contra esa falta de autonomía podemos seguir quejándonos y esperando que los fabricantes escuchen nuestras súplicas, o también podemos, mientras tanto,
intentar aprovechar al máximo los recursos que el terminal nos ofrece para no gastar tanta batería. Siguiendo estos consejos conseguirás ahorrarla y tal vez incluso llegues a estar un día entero sin cargar tu teléfono…
Calibrar el brillo tú mismo
Casi todos los terminales cuentan hoy en día con
una opción que nos calibra por sí misma el brillo de la pantalla, según estemos recibiendo más o menos luz. Sin embargo, ese calibrador gasta muchísima batería al tener que estar trabajando constantemente.
Si lo hacemos por nuestra cuenta, en lugar de ponerlo en automático, veremos como el gasto de batería se puede reducir. Lo habitual es que utilicemos el móvil en espacios iluminados, pero no con luz directa, por lo que un brillo medio servirá para trabajar con él.
Filtra bien las aplicaciones que instalas
Hay aplicaciones que parecen haber sido concebidas por una mente maligna y lo único que hacen es gastar nuestra batería de una manera exagerada, devorándola por completo. Seguro que muchos tenéis
Facebook en vuestros terminales, y lo habréis notado. Pero no es la única.
Muchos juegos también lo hacen, e incluso algunas de estas apps que nos prometen limpiar nuestra RAM para que el rendimiento del terminal sea óptimo y vaya más rápido. En muchos casos lo consiguen, pero a
un coste muy alto en lo que a consumo de batería se refiere.
No dejar los datos móviles siempre funcionando
Hay personas que tienen la costumbre de
dejar puestos los datos móviles, estén o no conectadas a Internet, o por tener que estar conectados absolutamente todo el tiempo. Sin embargo, lo mejor es conectar estos datos solo cuando vayamos a utilizarlos (ahorrando así no solo batería, sino también consumo y por tanto, dinero), y luego apagándolos cuando no los necesitemos o no vayamos a revisar el móvil en un rato.
Si estamos en una zona WiFi, será mucho mejor tirar de esa conexión, más económica y menos acaparadora de la batería, por supuesto.
El GPS, solo cuando sea estrictamente necesario
Otra de las verdaderas funciones que aniquilan nuestra batería es la del GPS, siendo solo utilizada en algunos casos, como cuando estamos buscando un nuevo lugar que no conocemos.
Lo de utilizarlo para mostrar nuestra ubicación durante todo el tiempo es una muy mala idea, y no solo por descubrir todos nuestros pasos y ser fácilmente rastreables, sino porque acabaremos con nuestra batería en cuestión de unas pocas horas. Como el resto de funciones, no debemos dejarlas encendidas sin más, hay que saber cuándo son neceasrias y cuando no, y en este último caso, no mantenerlas.
Los terminales con las mejores y más duraderas baterías
Lo prometido es deuda. A pesar de que por norma general,
los smartphones actuales no suelen venir muy bien servidos en lo que a la batería se refiere, todavía quedan algunos modelos que destacan por su buen uso de la batería, o por una impresionante autonomía que nos permitirá estar muchas horas sin tener que cargar de nuevo el terminal.
Son teléfonos de gama media-alta que, pese a sus muchas prestaciones, ofrecen también un buen equilibrio en lo que a su autonomía se refiere, tanto de marcas muy conocidas como de otras que poco a poco se abren camino.
Redmi 3
Los fabricantes chinos están pujando fuerte por hacerse con el mercado, y ahí tenemos a
Redmi que con este terminal logró llamar la atención de muchos usuarios sobre todo por sus geniales prestaciones a un precio muy económico, pero también por su gran autonomía en cuanto a batería. La capacidad de la misma es de
4100 mAh, lo que tiene aún más mérito tratándose de un teléfono de solo 144 gramos. Los que la han probado afirman que, con un uso moderado, el móvil aguanta más de dos días sin cargarse.
Moto Z Play
Otra de esas interesantísimas opciones de gama media a precio muy razonable y con muchas características interesantes, empezando por su sistema operativo “pelado”, gracias al cual el terminal va como un tiro y podemos aprovechar todo lo bueno de Android tal y como se pensó desde un primer momento.
Su batería supera los 3500 mAh y además es compatible con carga rápida, por lo que no tendremos que preocuparnos demasiado por quedarnos sin ella en el momento menos oportuno.
Huawei Mate 8
La firma china que más está destacando en ventas en toda Europa es sin
duda Huawei, que se está posicionando como una de las mejores opciones actualmente a la hora de adquirir un teléfono, a la altura de Samsung o LG. El Mate 8 es una bestialidad de terminal con unas prestaciones muy altas que además
cuenta con una batería de más de 4.000 mAh que se puede cargar en poco más de una hora, y aguanta más de dos días, con un uso normal del terminal. La demostración absoluta de que este tipo de terminales pueden existir y de hecho, son lo que el usuario necesita y desea.
Los mejores precios para estos móviles
Los terminales que hemos destacado
son de gama media-alta, por lo que su precio siempre superará los 300 euros, como poco, en el caso del Redmi. Sigue siendo un precio económico si lo comparamos con los de otros terminales de marcas más potentes,
pero aun así pueden ser demasiado caros para los usuarios. Si ves que el presupuesto no te llega para comprar uno de estos terminales salidos de fábrica, tal vez puedas
optar por el mercado de segunda mano, donde seguro que encuentras un precio mucho más interesante por estos mismos terminales.
En los portales de anuncios clasificados podrás encontrar numerosas referencias a estos y otros terminales igualmente interesantes con muy buena batería, para acabar ya con ese problema que lleva seguramente meses martirizándote. Es cierto que existen terminales de gama baja con un gasto mucho menor de batería, pero también con unas características más pobres, lo que hace que se pierda ese equilibrio que se tiene que dar entre la calidad y el precio.
Nosotros hemos apostado por teléfonos que nos ofrecen muy buenas opciones, y que además tienen un precio razonable, centrándonos sobre todo en los que destacan por su ingente batería, uno de esos componentes que muchas veces pasamos por alto al comprarlos… pero que son decisivos en su uso.