Desde que las nuevas generaciones nacen prácticamente con un teléfono móvil o un ordenador bajo el brazo,
las compras por Internet se han convertido en algo mucho más masivo que al principio de la era cibernética, por el simple hecho de que hoy en día todo es mucho más popular y porque no decirlo, también seguro.
Los sistemas de pago online se han mejorado muchísimo, siendo ya muy confiables, y la gente ha decidido aprovechar esto para sacarle el máximo partido a la red, donde se puede encontrar absolutamente de todo si sabemos buscar bien.
Ya estés mirando en portales de anuncios clasificados como éste, en tiendas online especializadas o incluso en plataformas de subastas, lo que te podemos asegurar es que podrás encontrar cualquier cosa que busques con un poco de paciencia. Eso sí,
también hay que saber prestar atención a la forma en la que debemos pagar el producto, sobre todo si es a través de este tipo de portales donde los vendedores son individuos y no empresas.
Para evitar posibles estafas, nos aseguraremos bien de que el método de pago nos protege como compradores, y evitaremos cualquier tipo de compra que no nos asegure al cien por cien la posibilidad de pagar de manera fiable.
Los medios de pago online más confiables
Aunque
al principio las compras online eran mucho menos seguras y apenas se permitía pagar con un método, hoy en día son numerosas las formas que tenemos para adquirir productos por Internet. Varían, eso sí, dependiendo de cada tienda online o cada plataforma, pero es cierto que hay algunas más confiables y sobre todo sencillas de utilizar que otras.
Es hora de conocer los métodos de pago online más fiables, para asegurarnos de que nuestra compra no va a salir mal.
Tarjetas de crédito
Es sin lugar a dudas
el medio más confiable para pagar por Internet, a pesar de las dudas que todavía sigue generando para mucha gente eso de poner nuestro número de tarjeta en “cualquier página”.
Es un método fiable y sencillo, que ha sido perfeccionado gracias también a la colaboración de los bancos, que ofrecen medios como contraseñas o confirmaciones a través de nuestro teléfono, para hacer de las compras con tarjeta algo cien por cien seguro. Por supuesto, hemos de confiar igualmente en la página en la que estamos comprando antes de meter nuestro número en ella, para evitar problemas.
Paypal
El método de pago virtual más conocido en cuanto a la realización de compras online. Gracias a Paypal podemos no solo enviar sino también recibir pagos por servicios o productos, algo muy común en los portales de anuncios clasificados o en los de subastas.
Muy utilizado hoy en día en la red, gracias a que se ha extendido a casi cualquier tienda online, es también una opción interesante si no queremos meter el número te nuestra tarjeta, siendo un sistema cien por cien seguro. Eso sí,
en ocasiones hay que pagar ciertas comisiones que pueden encarecer un poco el precio de los productos que adquirimos.
Google Wallet
El medio de pago creado por los de Mountain View nos puede solucionar más de una vez la papeleta si no disponemos de los anteriores métodos, o simplemente preferimos utilizar otro por temas de seguridad. Eso sí, Google Wallet no es un método tan común como los anteriores, aunque
en la mayoría de tiendas virtuales relacionadas con Google, como la Play Store, se puede pagar con él, y eso significa acceder a juegos, aplicaciones, libros electrónicos, música y película con nuestra cartera virtual. Es un medio sencillo, rápido y eficaz, pero todavía no tan popular.
Transferencia bancaria
Es otro de los métodos más extendidos, aunque
ciertamente uno de los que menos confianza genera en el público mayoritario. Y es que todavía tenemos la idea de que los datos de nuestra cuenta deberían ser secretos y no queremos dárselos a nadie. Es evidente que no pasa nada por pasar nuestro número de cuenta a un cliente o hacer un pago desde la misma a un vendedor. Eso sí,
es mejor hacerlo a través de una plataforma segura como Trustly, que necesita de confirmación por parte del vendedor y el comprador para que el pago se haga efectivo, haciendo mucho más segura la transferencia.
Pago contra reembolso
Si somos los compradores del producto, ésta es seguramente la opción más segura ya que solo pagaremos por él cuando lo recibamos. Esto hace que también sea un poco más cara, ya que
muchos servicios de mensajería aplican una cuota especial a esta modalidad de envío. Si queremos asegurarnos de que la compra nos llega en buen estado,
es una opción magnífica también para poder pagar en efectivo y no tener que utilizar tarjetas ni ningún otro medio online. Y sí, hay muchas tiendas virtuales que siguen ofreciendo esta opción.
Además de los métodos de pago,
existen otras muchas formas de asegurarnos que la compra que hacemos por la red no es ningún tipo de estafa y que vamos a recibir lo que estamos comprando, sin ningún tipo de problema. Debemos prestar atención al tipo de empresa o tienda online en el que compremos, y si son personas individuales los que lo venden,
tratar de concretar lo máximo posible todos los detalles de la transacción para evitar desagradables sorpresas a la hora de la verdad.
Páginas con conexión segura
Dentro del protocolo de Internet
existen páginas de conexión segura, en las que aparece en la barra del navegador un símbolo verde, junto a la propia dirección de la página, e incluso a veces también un mensaje claro donde se nos afirma que Es Seguro. Cada vez que vayamos a introducir nuestros números de tarjeta o similares en una página para realizar una compra online
nos aseguraremos de que esa página tenga ese método de seguridad, ya que en este caso podremos respirar tranquilos porque será mucho más difícil de hackear. Los sistemas de pago online como Paypal ya incorporan este método de seguridad.
Revisar bien las fotografías o vídeos reales del producto
Sobre todo en los intercambios entre particulares, cuando estés comprando algo a otra persona a través de una página de subastas o un portal de anuncios clasificados, lo mejor y más sabio es
pedirle a esa persona fotos reales del producto o incluso vídeos para comprobar su funcionamiento, en caso de que sea un electrodoméstico, un instrumento musical, etc…
Comprobaremos que el vídeo o la foto haya sido tomada en el día en que se la pedimos y que es cien por cien original, para evitar posibles engaños.
Huir de los precios demasiado bajos
Si estamos buscando algo por Internet en portales de segunda mano y demás es porque queremos conseguirlo a mejor precio, y desde luego que encontraremos gangas, pero de ahí a fiarnos de cualquier anuncio en el que el producto esté a un precio demasiado bajo hay un trecho. De hecho,
deberíamos mirar todos los anuncios que haya de ese objeto en cuestión, compararlos con el precio que tiene al ser comprado nuevo y luego hacer una media.
Si el precio está muy por debajo de esa media, el engaño es casi seguro.
No dar más datos de los necesarios
A la hora de pagar en una tienda online con nuestra tarjeta, por ejemplo,
los datos que necesitamos introducir son el propio número de tarjeta, nuestro nombre, la fecha de caducidad de la misma para asegurarnos de que está activa y como mucho, el código CVV que aparece en la parte posterior de la propia tarjeta, como método de seguridad. Posteriormente, algunos bancos nos pedirán confirmación a través de una clave enviada a nuestro teléfono. Pero
si nos piden introducir datos más allá de esto, debemos desconfiar, porque no son necesarios para hacer la transacción y podríamos estar ante una estafa.
Internet cada vez es un lugar más seguro
Todavía seguimos leyendo en los periódicos y en viendo las noticias
casos en los que hay gente que ha sido estafada al comprar algo por Internet. No vamos a dudar de que los casos sean reales, pero es cierto que a pesar de lo que muchos puedan pensar, Internet es un lugar cada vez más seguro a la hora de realizar compras. Como hemos expuesto anteriormente,
los métodos de pago son ahora mucho más eficientes, y eso ya es un paso enorme para que la desconfianza a la hora de comprar por la red desaparezca por completo.
Siguiendo los consejos que hemos puesto arriba y teniendo muy claro que debemos ser cautos desde el primer momento, comprar por Internet no debería darnos ningún problema ya que es algo que cada vez hace más gente, y por eso también es lógico que el número de engaños haya crecido, en tanto que el número de compras también lo ha hecho de forma espectacular en los últimos años.
Comprar por Internet es hoy en día una alternativa rápida y eficaz para encontrar todo lo que queremos, así que no tenemos porqué desaprovecharla.