A la hora de comprar un coche deportivo de segunda mano, lo primero que hay que hacer es
establecer unas expectativas realistas de lo que pretendemos comprar. No podemos exigir a un coche usado lo mismo que a uno nuevo. Ni los asientos olerán a nuevos, ni el motor sonará igual y ni mucho menos estará en las mismas condiciones que cuando salieron de fábrica.
Es bastante común que este tipo de vehículos ya haya recibido alguna reparación, e incluso, que algunas de sus piezas hayan sido cambiadas. Sin embargo, lejos de restarle valor, estos factores podrían incluso aumentar el precio de mercado de los mismos, todo dependerá de los extras, componentes o accesorios que han sido añadidos.
Podríamos decir por tanto que, a la hora de comprar un vehículo de segunda mano, es mucho más importante,
el valor del vehículo en el momento de la compra y su relación con el precio que ha puesto su dueño por él. De esta manera, el objetivo principal será el de conseguir un coche cuyo valor sea el mejor al que podamos optar, a cambio del mismo dinero.
Precisamente,
el factor económico es el segundo punto más importante en nuestro proceso de compra de un coche deportivo. Así pues, si habíamos establecido un presupuesto, d
ebemos tratar en la medida de lo posible de no sobrepasarnos. En este caso, siempre es mejor comprar el mejor vehículo que alcance nuestro presupuesto, antes que sobrepasarnos y al final acabar arrepintiéndonos.
Internet es una herramienta perfecta para ayudarnos en este punto. Establecer filtros poniendo un coste máximo, nos ayudará a que nuestros ojos se engolosinen con artículos que están fuera de nuestro alcance.
Una vez definidos los aspectos, “qué queremos” y “cuánto estamos dispuestos a pagar por ello”, entonces tocará andar a ver y controlar. Es fundamental que
revisemos con mucho cuidado el vehículo, buscando desperfectos o fallos que el vendedor desee ocultar. En este sentido son cuatro los aspectos que no podemos pasar por alto en ningún caso: El interior del vehículo, el cuerpo, el motor y los documentos asociados al mismo.
Si alguno de estos elementos no corresponde a lo descrito por el vendedor, o no estamos satisfechos con ellos,
deberemos de desechar la compra o, en su defecto, exigir una considerable rebaja para seguir con el proceso de compraventa.
Si todo está conforme, entonces
debemos hacer una prueba de conducción.
Si cuando vamos a comprar un coche sacado de fábrica nos dejan probarlo en el concesionario, en un vehículo de segunda mano la necesidad de hacerlo es aún mayor si cabe, especialmente si se trata de un coche deportivo que ya tenga unos años..
¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de seleccionar los neumáticos para nuestro coche?:
Cuando se compra un vehículo de segunda mano,
es bastante comprensible que haya determinadas cosas de este, que no nos gusten. Una de ellas pueden ser los neumáticos, los cuales pueden estar muy desgastados o simplemente ser de un estilo que no encaje con el nuestro.
Por ello, a la hora de comprar neumáticos nuevos, hay
una serie de cosas que debemos tener en cuenta, si queremos mejorar el confort en la conducción y reducir el consumo lo máximo posible.
Si acudimos directamente al concesionario fabricante del vehículo que hemos comprado, debemos saber que, generalmente, éstos no aceptarán que seamos nosotros los que elijamos los neumáticos libremente. Por contra, lo que ocurrirá será que
tratarán de vendernos la llanta a la que ese vehículo ha estado asociada desde el momento en el que salió de fábrica.
Por este motivo,
si deseamos personalizar nuestras llantas, lo mejor será que busquemos lejos del concesionario del fabricante. No obstante, cuando no tengamos demasiados conocimientos en la materia, es posible que esta alternativa, pueda echarnos para atrás. De ahí que sea tan relevante tratar de comprender las características que debemos tener en cuenta antes de decantarnos por uno u otro.
En primer lugar, si tenemos el neumático delante nuestra, nos daremos cuenta de que en el lateral aparecen una serie de números y letras.
Veamos a que corresponde cada número en cada caso:
La primera cifra, corresponde a
la anchura del neumático. Después de un espacio, se nos muestra la
altura de la misma, a continuación el
diámetro de la llanta, posteriormente el
índice de carga y para concluir el
código de velocidad. En función de nuestras necesidades, deberemos de elegir un tipo de neumático u otro.
Un aspecto a tener en cuenta es el hecho de que,
poner neumáticos más grandes y pesados, supondrán un mayor consumo en nuestro vehículo, sin embargo, la diferencia no debería ser tan decisiva como sí que lo es la fricción, o el tipo de conducción que realicemos.
Al margen de esto, podemos determinar que,
todos aquellos que deseen llevar a cabo una conducción más deportiva, necesitarán de neumáticos que tengan mucho agarre y estabilidad. No obstante, también hay que distinguir entre si pensamos utilizar más el coche por autopista o si por el contrario pensamos hacer lo propio en ciudad.
En el primer caso, debemos optar por neumáticos de alto rendimiento, mientras que,
si vamos a movernos por carreteras urbanas, será más conveniente adquirir neumáticos de baja resistencia a la rodadura.
El factor climático también suele ser un aspecto a tener en cuenta. Si vivimos en una ciudad en la que las diferencias entre el verano y el invierno son muy grandes, entonces será conveniente que tengamos dos pares de neumáticos en cada lado. De esta manera, cuando nos aproximemos a la llegada de una u otra estación optaremos por una tipología, o por la otra. Este aspecto, si bien no es totalmente necesario, te ayudará a aumentar la durabilidad y el agarre de los neumáticos.
¿Cuáles son los mejores coches deportivos de 2016?:
Si bien los coches deportivos clásicos tienen un gran encanto,
los vehículos actuales encuadrados en este sector tampoco tienen nada que envidiarles. Un diseño cuidado, un consumo cada vez menor, una gran velocidad y capacidad de aceleración, y unos materiales de alta calidad cuyas líneas han sido cuidadas hasta el más mínimo detalle suelen ser las características comunes que todos ellos comparten.
No obstante, cada coche deportivo es un mundo, por lo que
a la hora de elegir hay que analizar las características que nos ofrece cada uno de ellos. Veamos un listado en el que se incluyen los mejores vehículos deportivos de este 2016:
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Lexus LC 500: Bajo unas líneas futuristas y poco comunes, este modelo se caracteriza, además de por su apariencia, por su motor V8 de 467 caballos, su caja automática de cambios (10 velocidades) y la gran tecnología que puedes encontrar en su interior.
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Lotus Exige Sport 350: Si te gustan los diseños más conservadores entonces podría gustarte este modelo, caracterizado por su bajo peso (1.125 kg) y su gran agilidad. Se trata de un modelo que monta un motor V6 sobrealimentado capaz de alcanzar los 351 caballos.
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El BMW M2, es un vehículo rápido donde los haya. En apenas 4,3 segundos es capaz de ponerse de 0 a 100 km/h. Cuenta con un motor turbo de seis cilindros y una potencia de 370 caballos. Mantiene las líneas de diseño que desde siempre han caracterizado a los BMW, pero dándole un toque deportivo que parece quedarle realmente bien.
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Fiat 124 Spider: Bastante más modesto que los anteriores (apenas 140 caballos), este modelo posee las características estéticas de los coches deportivos, incluyendo una capota que puede convertir a este Fiat en todo un descapotable. A nivel de rendimiento en carretera, no parece que pueda alcanzar los registros de sus competidores, pero es una fantástica opción para quienes tengan un presupuesto bastante más ajustado.
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Ferrari F12tdf: No podíamos despedir esta lista sin incluir al menos un vehículo de la marca de coches deportivos por excelencia, Ferrari. El modelo prácticamente no necesita presentación. Ridiculiza las cifras del BMW M2 en términos de aceleración al lograr alcanzar los 100 kilómetros por hora en tan sólo 2,9 segundos. Su motor 6.3 V12 de 780 caballos es uno de los grandes culpables de que esto ocurra. Comprarlo no estará al alcance de cualquiera. En primer lugar su por elevado precio y en segundo porque únicamente saldrán a la venta 799 unidades.
¿Cuáles son los coches deportivos que menos consumen?:
Si lo que te preocupa es que el coche consuma demasiado, entonces
lo mejor será analizar cuáles son los vehículos que menos combustible necesitan:
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El Skoda Octavia Combi RS 2.0 TDI, un deportivo de cinco puertas, muy espacioso, con un gran maletero y que apenas necesita de 5,34 litros cada 100 kilómetros para seguir circulando.
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El Audi TT 2.0 TDI, por su parte, requiere de 5,49 litros cada 100 kilómetros, una cifra de lo más interesante para un vehículo que dicha marca.
-En el Top 3 se sitúa
el Mini Coupé Cooper SD, caracterizado por sus 184 caballos de potencia y un consumo de tan sólo 5,69 litros cada 100 kilómetros.
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El BMW i8, está ya en un escalón más cercano a lo normal, su consumo de 6,55 litros por cada 100 kilómetros son espectaculares si se tiene en cuenta que monta un motor 1.5 de tres cilindros turboalimentado que alcanza los 231 caballos.
-Concluimos este top 5 con
el Toyota GT 86, un deportivo de 200 caballos con un consumo por debajo de los 7 litros/100 km y que ofrece unas sensaciones en la conducción que ha sido uno de los puntos que más han valorado quienes lo han probado.
¿Cuáles son los mejores coches deportivos de bajo precio?:
Si quieres tener las sensaciones de velocidad y confort, presumiendo de coche deportivo, pero no tienes suficiente dinero como para hacerte con alguna de las 'bestias' que anteriormente mencionamos, entonces podría interesarte esta lista en la que
recogemos cuáles son los 5 deportivos más económicos que puedes encontrar hoy en día (de más caro a más barato):
Seat León SC Cupra 290: 33.582 euros
Ford Fiesta ST: 22.825 euros
Peugeot 208 Gti: 21.300 euros
Abarth 500: 18.900 euros
Suzuki Swift Sport: 18.375 euros
Recuerda que estos precios son para modelos sin extras y comprados en un concesionario
, si compras esos mismos artículos en portales de anuncios clasificados como eAnuncios.com, la diferencia podría ser de varios miles de euros.