Los meses de calor suelen ser bastante molestos, en vista de las incomodidades que provocan. La sensación sofocante de las elevadas temperaturas puede impedir incluso un normal desempeño en nuestro día a día. Refrescarse se convierte entonces en una prioridad y para ello hay muchas opciones, no obstante no todas son igual de eficientes.
Ventiladores, abanicos manuales o duchas frecuentes pueden atenuar el intenso calor. Pero
la opción más difundida y en muchas ocasiones la más efectiva es el uso de un aire acondicionado que sea capaz de refrescar el ambiente. Este aparato permite regular la temperatura de una habitación u oficina, hasta un nivel bastante más confortable.
Los acondicionadores de aire se vienen fabricando desde hace mucho tiempo. Sin embargo, con la evolución tecnológica han ido perfeccionándose y actualmente éstos
ofrecen una gran variedad de características y potencia, mientras que sus precios están mucho más al alcance de los usuarios comunes.
Como cabe esperar,
los equipos más potentes y avanzados son los que ocupan el rango de precios más alto. La marca del aparato es un factor a tomar en cuenta también; las marcas más reconocidas tienden a ser más costosas, aunque generalmente también ofrecen unas mejores prestaciones y suelen ser sinónimo de garantía. En cualquier caso, pese a la disminución de los precios con respecto a hace unos años, la compra del aire acondicionado sigue siendo sinónimo de un gran desembolso de dinero, aunque dicha cantidad dependerá del equipo que adquiramos.
Adquirir un aire acondicionado que ofrezca suficiente confort por un precio razonable, requiere una intensa búsqueda. Para ello hay que
analizar muy seriamente las diferentes opciones que nos ofrece el mercado y comparar las prestaciones que nos ofrecen las diferentes marcas.
Por ello, se recomienda echar un ojo, no sólo a aquellas marcas consolidadas, sino también a marcas emergentes que puedan ofrecer equipos de calidad a precios muy competitivos. No obstante, una de las opciones que más nos permitirá ahorrar en la compra de nuestro aire acondicionado será la
revisión de las ofertas que los diferentes vendedores puedan lanzar, especialmente cuando estamos fuera de temporada como sucede en la actualidad, siendo muy posible encontrar un muy buen precio, en esta época del año.
Una recomendación sensata es
revisar las reseñas que otros compradores hayan dejado sobre el equipo en el que estamos interesados. Opiniones y calificaciones de clientes pueden aclarar el panorama. Se debe preferir consultar en los artículos que tengan más opiniones y reservas.
¿Qué tipos de aire acondicionados existen?:
El principal criterio de clasificación del aire acondicionado está
íntimamente relacionado con el uso al que se destina. Los aires acondicionados destinados a grandes espacios como edificios de oficinas o instituciones, suelen ser grandes y utilizan agua helada para ofrecer un mejor servicio. Estos también se usan para instalar una red de aire acondicionado colectivo, en donde un solo equipo acondiciona varios espacios.
Por el contrario, los aire acondicionados más pequeños por lo general se destinan al uso doméstico, y
emplean un gas refrigerante manejado por un compresor. Se usan para enfriar individualmente espacios pequeños, como oficinas o habitaciones. Cada equipo se destina a un espacio.
La clasificación más reconocida entre los aires acondicionados se da entre los equipos domésticos de pequeño tamaño. Aquí se reconocen los
aires acondicionados de ventana, que son equipos de bloque único para colocarse en paredes exteriores. Una mitad del equipo da hacia el exterior de la habitación para extraer el aire caliente, y la otra da hacia adentro para ventilar aire refrigerado.
Los equipos llamados split (divididos o separados, en español)
constan de dos partes que se complementan. La unidad compresora queda totalmente fuera de la habitación, y desde allí envía refrigerante a la unidad difusora. El difusor está dentro de la habitación, y
tiene un evaporador y un ventilador que esparce el aire refrigerado.Existen también los aparatos portátiles de aire acondicionado, que
funcionan como una pequeña unidad refrigeradora. La unidad se halla completamente dentro de la habitación, y el aire caliente se extrae a través de un tubo.
¿Es mejor reparar un aire acondicionado roto o comprar uno nuevo?:
Que un aire acondicionado se estropee es
uno de los percances que cabe esperar con el uso y el paso del tiempo del mismo. Si bien es posible que un equipo nuevo se dañe al poco tiempo de haberlo comprado, o directamente no funcione desde el principio esto es algo que puede pasar. Por ello, toca preguntarse ¿Qué es lo que se debe hacer entonces? ¿Reparar la unidad, o desecharla para comprar una nueva?
El sentido común dice que
hay diferentes escenarios para esta situación, y cada uno tiene su curso de acción. Hay, sin embargo, aspectos generales que debemos seguir en este tipo de situaciones. Un equipo nuevo, por ejemplo, debe estar amparado por una garantía. Es importante conocer los detalles de dicha garantía: cuánto tiempo tiene de validez, qué tipo de daños ampara, etc.
Así pues, si optamos por comprar un aire acondicionado totalmente nuevo, no hay que llevarlo a reparar ni tampoco hay que comprar uno nuevo. Simplemente, debemos
hacer valer la garantía.
El dilema se nos presenta cuando ya la duración de la garantía que cubra al aire acondicionado ya ha concluido. Por un lado, una reparación quizá
sólo aumente ligeramente la autonomía de un aparato que terminará por quedar inservible antes o después. Por otro, el equipo nuevo será un gasto importante, que quizá puede evitarse o posponerse, sobre todo si estamos en los últimos meses de calor y podemos esperar hasta el siguiente año para comprar otro. Dejando a un lado el asunto de las diferencias monetarias entre gastarnos el dinero en la reparación o comprar uno nuevo, hay una buena consideración que es importante tener en cuenta: La edad del aparato.
Si el que se estropea es un aire acondicionado demasiado viejo, siempre será mejor renovarlo. Los equipos antiguos se vuelven obsoletos e ineficientes, y lo más probable es que vuelvan a estropearse muy poco después de haberlos llevado a reparar.
El gasto que supone llevar a reparar el aire acondicionado en repetidas ocasiones siempre
será una opción mucho peor que optar por una realizar una inversión mayor y comprar un equipo nuevo capaz de durarnos durante varios años. Por el contrario, los acondicionadores que no son tan viejos sí que podrían repararse unas pocas veces posponiendo dicha compra para más adelante.
Si los equipos reciben una correcta reparación, su duración podría darnos margen de maniobra durante algunos años más, sin embargo todo ello depende de la parte que haya resultado dañada. En cualquier caso,
la opinión del técnico capacitado será determinante para que optemos por repararlo o por el contrario por comprar uno nuevo.
¿Dónde se puede estudiar reparación de aires acondicionados?
Dando pues por sentado que hay ocasiones en las que merece más la pena reparar aire acondicionado que comprar uno completamente nuevo, entonces podría ser una buena idea preguntarse dónde aprender a hacerlo. Así pues, tanto si tu idea es reparar tus propios equipos, como si tu intención en la de vivir de ello, haz de saber que para prestar este tipo de servicios debes tener una certificación y estar habilitado para dicho trabajo.
Los técnicos que reparan y dan mantenimiento a los aires acondicionados se denominan técnicos frigoristas. No sólo deben estar entrenados en el funcionamiento eléctrico y térmico de los aires acondicionados. También deben tener claras las normativas legales acerca de niveles de ruido y emisiones al ambiente.
Para aprender a reparar aires acondicionados podemos optar por diferentes métodos. De todas ellas, la opción menos ortodoxa podría ser la de aprender de forma autodidacta por internet. Sin embargo, con este método no tendríamos ningún certificado que nos acredite para ello y, además, es posible que no aprendamos tanto como si optamos por realizar un curso especializado.
Otra alternativa podría ser la de acudir como aprendiz a algún taller especializado y aprender todos los conocimientos que necesitamos para desempeñar dicha función. Esta opción podría ser de gran utilidad si nuestra idea es reparar nuestros propios equipos acondicionados de forma casera. Sin embargo, no podremos utilizar nuestros conocimientos para reparar equipos de terceros sin el correspondiente certificado.
La normativa para ejercer el trabajo de técnico de aires acondicionados es bastante rigurosa. Por este motivo, la opción más conveniente es acudir a algún centro especializado en el que realicen cursos frigoristas, o aquellos en los que te formen expresamente para ello.
En función de la región en la que te encuentres, es muy posible que existan institutos de formación profesional que impartan ciclos formativos de electricista o similares que te enseñen además de otras funciones, a reparar aires acondicionados y cuyo título será bastante tenido en consideración por parte de las empresas que requieran de personal con tu cualificación.
No obstante, si preferimos encontrar un centro privado en el que nos enseñen a reparar exclusivamente aires acondicionados, todo lo que tenemos que hacer es acceder a alguno de los múltiples cursos de este tipo que se ofrecen en páginas de anuncios clasificados como eAnuncios.com.
Otras opciones que tenemos a nuestra disposición de forma online, es la de realizar este tipo de cursos de manera no presencial a través de páginas como Emagister.com, cuyo título (en caso de superar el curso), ofrece acreditación y habilitación para desempeñar el trabajo.
Para realizar estos cursos es requisito haber culminado la Educación Secundaria. Esto debe funcionar como estímulo para que las personas interesadas en la reparación de estos artefactos, completen su educación. Son cursos que han sido creados no para reparadores ocasionales, ni para quienes deseen hacer bricolaje de aires acondicionados, sino para personas que desean trabajar como frigoristas, y vivir de ello.
¿Qué proporción debe haber entre la potencia del aire acondicionado y las dimensiones de una habitación?
El aire acondicionado enfría una habitación desde un punto específico de la misma. Cuando el compresor comienza a funcionar, la temperatura del recinto comienza a bajar gradualmente. Al cabo de un tiempo, todo el aire dentro tiene una temperatura más o menos homogénea. El compresor se detiene, y el aire comienza a calentarse. La temperatura sube, hasta que el compresor vuelve a encenderse.
Este proceso toma su tiempo, y dicho tiempo será mayor si la habitación a enfriar es más grande, mientras que, por el contrario, dicho tiempo será menor si la habitación es menor o en su defecto, si el aire acondicionado es más potente. Por ello, las dimensiones del lugar en el que va a instalarse es uno de los factores más importantes que deben tomarse en cuenta para averiguar la potencia necesaria. La cantidad de personas que estarán normalmente en la habitación, y la temperatura exterior media, también influyen en el cálculo. También se toma en cuenta la cantidad de electrodomésticos en la habitación.
Realizar dicho cálculo es bastante complejo para quien no tenga estudios sobre ello, por lo que normalmente esta función es algo que se suele dejar al frigorista que nos lo instale o la tienda en la que lo compremos. No obstante, si queremos estar seguros de que nadie pretende engañarnos vendiéndonos un aparato con una mayor potencia de la que necesitamos, siempre podemos recurrir a algunas páginas de internet que se encargan de realizar las operaciones para estimar la potencia que podamos llegar a necesitar.
Para ello, todo lo que debemos hacer es medir las dimensiones de la habitación (ancho, largo y altura) en metros. Cuando tengamos estos tres valores los multiplicamos. La cuenta indicará el volumen del recinto en metros cúbicos. Por ejemplo, un dormitorio de 4 m de largo, 3 m de ancho y 2,5 metros de altura, ocupará un volumen de:
4 m x 3 m x 2,5 m = 30 m³
Con esto de obtiene el volumen de la habitación. Este resultado se multiplica por algunos factores que darán un estimado en frigorías, o en BTU, de la potencia requerida. Algunas páginas recomiendan multiplicar el número por 50 para obtener la potencia en frigorías. Otras agregan varios factores para obtener la potencia en BTU. Es importante recordar que la respuesta que se obtenga seguramente no coincidirá con la que ofrezcan los aparatos comerciales. Por lo que habrá que adquirir el que tenga la potencia inmediatamente superior a la cantidad calculada.
¿Qué tipos de aire acondicionado consumen menos?
Una de las preocupaciones más comprensibles para cualquier comprador de aire acondicionado, es el consumo. A pesar del confort que ofrece, es uno de los aparatos eléctricos que más consumen, y el usuario desea gastar la menor cantidad de luz posible para así pagar menos en la factura mensual de electricidad. Por ello, uno de los factores que más hay que tener en cuenta a la hora de comprar un aire acondicionado es su consumo.
Huelga decir que
el consumo de dicho aparato dependerá en gran medida de la potencia que tenga el equipo, sin embargo también existen otros factores que influyen en que dicha cantidad sea una u otra. Los aires acondicionados portátiles se suelen considerar poco eficientes, debido a que generalmente todo lo que hacen es remover el aire que se encuentra en la habitación para generar esa sensación de frescor.
Los aires acondicionados de ventana suelen tener problemas de aislamiento térmico, por lo que el compresor funciona más. Si se quiere gastar menos luz, es conveniente pues instalar una unidad split. La separación física de los elementos del split
permiten un mejor aislamiento térmico y mejor desempeño del compresor.Sin embargo,
la tecnología ha evolucionado a nuevas formas de ahorrar energía en los aires acondicionados. El sistema llamado inverter, que regula la velocidad del compresor para que no pase de encendido a apagado y viceversa. Esto se traduce en
mayor eficiencia, menor consumo energético, y una mayor vida de la unidad.De todos modos, si se quiere reducir la factura de luz, se deben tomar en cuenta algunas recomendaciones adicionales:
- Dar un mantenimiento regular al aire acondicionado.
- No poner el aire acondicionado si la temperatura que deseamos alcanzar es demasiado baja.
- Buscar un aire acondicionado adecuado al tamaño de la habitación e instalarlo apropiadamente.
¿Cuáles son los aires acondicionados más silenciosos?:
Los equipos de aire acondicionado poseen en su interior un motor que es el que los hace funcionar. Un motor mueve las aspas que hacen circular el aire en la habitación, mientras que otro motor es el encargado de hacer funcionar el compresor para el refrigerante.
En los aires acondicionados split hay un motor que extrae el aire caliente del compresor, y otro en el difusor. Esto además del propio compresor. Todo ello hace que el ruido en los aires acondicionados sea prácticamente inevitable, sin embargo hay que diferenciar entre molestos ruidos que impidan que podamos realizar otras actividades con normalidad o aquellos que apenas emiten un ruido perceptible.
Una cosa que debemos tener en cuenta es que si el aire acondicionado está correctamente instalado y llevan un buen mantenimiento anual, los niveles de ruido del aire acondicionado se mantendrán dentro de la norma.
El ruido, en general la intensidad del sonido, pude medirse, y la unidad que se usa para medirlo se llama decibelio (dB). Se mide usando un aparato convenientemente calibrado llamado sonómetro, que se coloca a cierta distancia de la fuente de ruido. A medida que aumenta la distancia, disminuye la intensidad sonora. Se consideran ruidos fuertes los que superan los 70 dB. Alrededor de 60 dB se hallan los niveles de una conversación tranquila. Y de 45 o menos se entiende como un ambiente silencioso. El ruido de un aire acondicionado no debe provocar que el nivel suba a más de 55 dB de día. De noche no se deben superar los 45 dB.
Hay varios equipos de diferente gama que ofrecen bajos niveles de ruido. Al margen de otras consideraciones, están por ejemplo el split Samsung F-H9512, y el LG Privilege 12K. Estos producen 49 dB en el exterior, con 16 y 17 dB en el interior, respectivamente. Del lado de los equipos de gama baja se ubican el Samsung F-H5512, que genera 19 dB al interior y 46 dB al exterior. También el LG Star E12EL, con 20 dB internos y 47 dB externos.
Mejores aires acondicionados baratos 2016:
La compra de un aire acondicionado supone un desembolso importante, sea cual sea el que se elija. Mientras algunas personas se pueden permitir la compra de unidades de alta gama, la mayoría de los usuarios tenderán a cuidar cada euro que sale de sus bolsillos. Por ello, lo común es ir en busca de aires acondicionados baratos que ofrezcan una buena relación calidad-precio y cumplan con las expectativas deseadas.
Los de menor precio, sin duda, son los aires acondicionados portátiles, seguidos por los equipos de ventana. Sin embargo, los portátiles son en general ineficientes, y su utilidad suele estar reducida a habitaciones que se ocuparán temporalmente. Ejemplo de ello puede ser una habitación vacacional, o un puesto temporal de ventas en una convención.
Los aires acondicionados de ventana, por su parte, cuestan un poco más, y son algo más eficientes, aunque también tienen sus limitaciones. Esto se debe a que la mitad del aparato se halla fuera de la habitación. Es frecuente que la eficiencia de estos aires acondicionados se vea afectada por problemas de aislamiento térmico. Tanto el aire acondicionado de ventana como el portátil usan un compresor que se enciende y apaga para regular la temperatura. El consumo de estos equipos suele ser más alto que el de sus equivalentes modernos.
Las marcas más reconocidas de aires acondicionados, tienen equipos de gama baja a precios que rondan 400 o 500 euros. Samsung tiene por ejemplo el F-H5512, y LG el Star E12EL, ambos mencionados más arriba. Pero también Mitsubishi, Fujitsu y Panasonic ofrecen sus propios equipos baratos. Ofrecen características de gran calidad por un precio que vale la inversión. Una de las marcas más reconocidas en aires acondicionados es la japonesa Daikin. Su modelo AXB25C se vende entre 470 € y menos de 510 €, según la tienda y la región en la que te encuentres. Este modelo incorpora la tecnología inverter, que mejora la eficiencia del equipo, haciendo que consuma menos energía. Es para muchos la mejor opción en aire acondicionado.
¿Cuál es la causa más común por la que el aire acondicionado suelta agua?:
La situación del aire acondicionado que gotea suele ser muy común. El equipo suelta agua, pero esta agua no es de algún recipiente vital del aparato, ni significa que esté roto. Como el refrigerante circula por diferentes elementos del aire acondicionado, lo que ocurre es sencillo. Las superficies frías hacen que sobre ellas se condense el agua de la humedad ambiental. Esta humedad se acumula en gotas cada vez más grandes que eventualmente se acumulan y caen.
Las correctas instalaciones de aire acondicionado cuentan con una bandeja de recogida de agua que se condensa. Luego, el agua recolectada en la bandeja se conduce por medio de una tubería, hacia un apropiado desagüe.
De más está indicar que tanto la bandeja de recolección como las tuberías deben mantenerse en buen estado para evitar cualquier problema. Uno de los motivos más usuales es que el aire acondicionado suelta agua es el hecho de que las tuberías de recolección se obstruyen por suciedad u otra causa. Esto provoca que se llene la bandeja de recolección de agua, la cual comienza a derramarse.
Es necesaria entonces una revisión de los tubos para asegurarse de que no haya obstrucciones. De pasada, también revisar que no haya fisuras o daños que provoquen el goteo.
Otra causa puede localizarse en el filtro del difusor. La suciedad puede hacer que el aire frío no se difunda por completo en la habitación. La acumulación de aire frío alrededor de las superficies del aire acondicionado provocará condensación. Y esta condensación no irá a la bandeja, sino que goteará por el frente de la unidad. El agua de condensación puede llegar a congelarse, produciendo capas de hielo. Estas capas se pueden desprender con gran estrépito si la temperatura sube. En consecuencia, se deben revisar y limpiar periódicamente los filtros del difusor, para evitar obstrucciones en el flujo de aire.
¿Dónde se venden repuestos baratos para aire acondicionado?:
Los repuestos especializados, como motores, aspas o compresor, deben ser comprados a un distribuidor autorizado. Pero otras piezas de recambio, como válvulas, filtros y piezas de tubería, se pueden comprar en tiendas que ofrezcan esos productos, por un buen precio.
En internet es posible encontrar todo tipo de repuestos para aire acondicionado. De hecho la red es el lugar preferido de los usuarios para comprar repuestos para el control remoto, tuberías y filtros, e incluso hay páginas que tienen piezas de circuitos que se pueden usar como repuestos, tal como sucede con los condensadores. Entre dichas piezas se encuentran además termostatos, condensadores, y hasta motores pequeños.
No se recomienda comprar piezas de recambio si no se tiene conocimiento del tema o se consulta con algún experto cualificado pues se corre el riesgo de adquirir una pieza que posteriormente no realice la función que nosotros estábamos buscando.
Los portales de segunda mano como el nuestro permiten a los usuarios que así lo deseen, acceder a un gran catálogo de repuestos para aires acondicionados cuyo precio sin competencia ayudarán a que la opción de reparar nuestro aire acondicionado siempre salga más barato que hacernos con uno totalmente nuevo.
¿Cómo evitar que el aire acondicionado huela mal?:
A veces puede ocurrir que el aire acondicionado desprenda malos olores y que éstos se distribuyan por la estancia donde se encuentra. La mayoría de los técnicos coinciden en que los malos olores no suelen ser producidos por el aire acondicionado en sí, sino que más bien se trata de un agente externo que es el que los provoca. Por el contrario, se producen por alguna causa circunstancial, y el aparato difunde el olor.
La causa más común de malos olores suele ser suciedad en los filtros. El polvo contenido en el aire queda atrapado en los filtros del aire acondicionado, acumulándose. Esto suele promover la proliferación de bacterias y hongos, causantes de malos olores. Los olores se dispersan al encender el aire.
Tanto la bandeja como los desagües del aire acondicionado si se encuentran sucios son algunos de los otros culpables esta situación. La acumulación de agua se puede convertir en el ambiente propicio para los hongos y las bacterias. Sobre todo, al mezclarse con polvo acumulado por los filtros sucios. De modo que lo conveniente es mantener en buen estado de limpieza los filtros, desagües y bandeja del aire acondicionado.
Una causa indirecta de malos olores producidos por el aire acondicionado son los malos olores del entorno. Se debe observar si los malos olores se producen en las cercanías del compresor, o dentro de la habitación. De ocurrir esto, los olores pueden ser esparcidos por el aire acondicionado. Por lo tanto, hay que asegurarse de que el aire se encuentre en un entorno libre de malos olores.
¿Cuál es la temperatura perfecta a la que debe estar el aire acondicionado?
Existen regulaciones en cuanto a la temperatura a la que debe operar un aire acondicionado, aunque estas no se aplican a los aparatos domésticos. Este es un tema subjetivo, debido a que diferentes personas se sentirán a gusto con temperaturas diferentes. Por eso, para hablar de la mejor temperatura para operar el equipo, hay que considerar diferentes factores.
Lo primero es la temperatura del exterior. Un marcado contraste entre la temperatura del ambiente exterior y la del recinto, puede causar problemas. Pasar de calor extremo a frío, puede provocar efectos de salud adversos, como contracciones musculares. Igual efecto se puede producir si se ha estado en una habitación refrigerada y luego se sale de ella. Pasar por ejemplo de 18° a 32° puede provocar un golpe de calor. Está también el aspecto técnico. Una diferencia grande de temperatura entre interior y exterior, puede darle más trabajo al compresor. Esto es especialmente cierto en casos en que el aire acondicionado no alcance la temperatura programada. El compresor estará todo el tiempo funcionando, y disminuirá su vida útil.
La intención de un aire acondicionado no debería ser convertir una habitación en un frigorífico. Antes bien, debería servir para hacer más confortable la presencia humana en recintos cerrados. En especial en épocas de calor. Aunque la tentación sea programar temperaturas bastante bajas, como 16° o 20°, no hay que llegar a tanto. Con 24° o incluso 26°, se hace agradable cualquier recinto.
¿Cómo limpiar el filtro del aire acondicionado?:
El filtro de un aire acondicionado doméstico es una malla ubicada en la zona frontal del difusor de aire. Su función es retener partículas de polvo y suciedad del aire, para que no se esparzan en la habitación. Como consecuencia, estas partículas atrapadas se acumulan pudiendo con el tiempo bloquear el filtro y anular su función. Conviene entonces una limpieza periódica de este componente para mantener un óptimo funcionamiento del aire acondicionado. Cada quince días es un tiempo adecuado para mantener limpio el filtro del aire acondicionado.
En los aires acondicionados de ventana, el filtro tiene un asa que permite extraerlo hacia arriba o hacia uno de los lados. Los aires acondicionados split tienen una portezuela a lo largo del difusor. Esta se abre, dejando el filtro a la vista, y de allí se puede retirar. La limpieza se efectúa con agua tibia, usando las yemas de los dedos para retirar el polvo. No se debe usar demasiada fuerza en el procedimiento. Una vez limpio, es necesario esperar a que esté seco para colocarlo de nuevo en su sitio.
Algunos procedimientos de limpieza más profundos incluyen desinfección, y deben realizarse por personal cualificado, ya que se debe acceder a partes internas.
¿Qué aspectos deben tenerse en cuenta a la hora de comprar un aire acondicionado barato de segunda mano?:
Una opción que se puede considerar al adquirir un aire acondicionado, es la opción de comprarlo de segunda mano. Esta idea atrae más si se trata de un equipo barato.
Hay que decir en este caso, que como cualquier otra compra cuyos artículos ya hayan sido utilizados por teceras personas, este tipo de negocios conllevan un riesgo, y se debe tener mucho cuidado antes de concretar la compra para evitar engaños o estafas.
Primero, hay que comparar el precio del aire usado con unidades similares nuevas. Si la diferencia no es sustancial, probablemente será preferible la unidad nueva.
¿Es muy viejo el equipo? Los equipos nuevos se adaptan a regulaciones sobre el particular que han ido cambiando. Un aire acondicionado de vieja factura puede estar fuera de norma, lo que puede hacer que se pierda dinero. Se debe pedir constancia de las visitas de mantenimiento. Si no las tiene, es mejor no arriesgarse con un aire acondicionado que no se ha mantenido a punto. A veces se puede observar si el equipo tiene señales evidentes de deterioro. Esto ayuda a descartar en caso de que existan, pero no hay que olvidar que hay defectos que no son evidentes.
Es necesario verificar qué uso ha recibido el aire acondicionado. Un equipo que ha estado funcionando en alguna tienda o establecimiento, seguramente tendrá un desgaste mucho mayor que el que podría haberle dado un particular.
El sentido común dicta que hay que ir con cuidado con ofertas demasiado buenas. Así, cualquier precaución que se tome no será excesiva. Para finalizar, se recomienda hacer una prueba de que el aire acondicionado a comprar de segunda mano funcione perfectamente y que no pretendan darnos "gato por liebre".